I don´t know...

Ahora pues, si he hallado gracia ante tus ojos, te ruego que me hagas conocer tus caminos para que yo te conozca y halle gracia ante tus ojos. Ex. 33:13

Ayer fuimos al cine a ver la película I DON´T KNOW HOW SHE DOES IT. La comedia se trata de una mujer, Kate Reddy, esposa y madre de dos hijos- que además es una ejecutiva financiera. Esta mujer tiene que hacer malabares para balancear su carrera, su matrimonio y el amor que siente por sus hijos. La película muestra la importancia del matrimonio y de la familia, con fuertes valores morales, pero no deja de engañarnos con elementos feministas que pueden enamorarnos y confundirnos.

Kate Reddy es la típica mujer del siglo XXI. Capaz y bella, a la moda todo el tiempo. Vive con su esposo y está constantemente pendiente a las necesidades de sus hijos, de 2 y 5 años mientras trabaja en el área financiera, con una mega-oficina. Pero, obviamente tiene que sacrificar algunas cosas porque no todo puede hacerlo a la perfección. Generalmente, sus hijos son los sacrificados. Aunque siempre profesó el gran amor que sentía por ellos, su trabajo y el deseo de descollar en su carrera eran mas fuerte.

Su esposo consigue un buen negocio, y ella también. Este nuevo proyecto comienza a consumirle mas tiempo y muchos viajes. Sus hijos constantemente le reprochaban esto, pero aún así seguía con sus metas- trabajando con un señor hasta altas horas de la noche, quien era el socio de este proyecto. Todo por el éxito profesional. Este hombre comienza a enamorarse de Kate, de manera muy dulce, ella aunque se mantuvo fiel no dejó de coquetear con él pudiendo convertirse en una gran tentación.

Mientras todo esto pasa, su asistente Momo, quien trata de escalar a nivel profesional también queda embarazada. Kate la aconseja a no abortar y le habla de las maravillas de ser mamá.

Aunque no tiene "nada malo" a los ojos del mundo, muestra fuerte tendencias feministas de lo bien que luce el ser una mujer de estos tiempos- casada y profesionalmente exitosa. Incluso llega a criticar aquellas que han decidido quedarse en casa y atender 100% a sus hijos. El mundo sigue vendiéndonos una idea contraria al plan de Dios para nuestras vidas. No podemos servir a dos señores, no podemos tener un corazón dividido.

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