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sábado, 11 de diciembre de 2010

El Primer Lugar


“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás y extendiéndome a lo que esta delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.” (Filipenses 3:13-14)

El libro de Filipenses está lleno de grandes enseñanzas para las mujeres. Este versículo de hoy me llena de energía y vigor para seguir batallando la carrera de la fe; la carrera hacia la semejanza perfecta a Cristo. Pero esta carrera no es “a lo loco” que se corre; requiere honestidad de mi parte con mi carácter y un sentido de insatisfacción de mi condición actual.

Pablo resume toda esta carrera en una sola meta clara y sencilla: procurar con todas mis fuerzas, poner todo mi empeño en la semejanza a Cristo. Debo dejar de mirar atrás, no puedo seguir confiando que me parezco mas a Cristo porque sirvo en ministerios; no puedo quedarme estancada con los mismos fracasos y pecados de hace años. Mi meta es llegar al cielo y ser como Cristo. Cuando Dios me llame a Su presencia, a su tiempo, ahí recibiré mi premio, mi galardón de semejanza a Cristo. Pero, mientras tanto debo seguir luchando aquí en la tierra. Seguir adelante, no detenerme hasta lograr mi objetivo de ser como El.

No puedo debilitarme. El termino prosigo alude a un velocista, de esos que para ganar su carrera se les nota en la cara la actitud enérgica, decisiva y agresiva de conquistar el primer lugar. Así debo perseguir mi santificación. Debo ser la primera, con todo mi esfuerzo y ejercitando todos mis músculos espirituales para ganar el premio. Los corredores no están supuestos ni a mirar hacia los lados, porque pierden el enfoque, se distraen y terminan perdiendo la carrera. Mi mira está en el cielo, no en los alrededores; con esperanza y esfuerzo constante lo lograré.

El llegar al cielo, a una vida eterna, no se logra con mucho esfuerzo solamente. Es a través de Cristo, el único camino. Debemos llegar a El como El se dio a nosotros; a través de padecimientos y muerte, muriendo al pecado y crucificando la carne. Cristo, quiero ser como tu, eres mi TODO!

1 comentario:

  1. AMEN GLORIA A DIOS.
    LES VISITO DE EL SALVADOR, RECIBAN MUCHAS BENDICIONES DESDE MI BLOG
    www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com

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